La evolución de los precios al consumidor durante febrero registró una suba de 1,9%, con particular incidencia del rubro educación, según la consultora Orlando Ferreres y Asociados. De confirmarse, se ratificaría una continuidad en la desaceleración inflacionaria
De acuerdo con el cálculo que realiza la consultora en el Área Metropolitana de Buenos Aires, la inflación acumuló un alza interanual de 52,7%, mientras que el componente núcleo (que excluye los precios estacionales y los regulados) avanzó 2,5% mensual y 53,2% interanual.
De acuerdo al IPC del Indec, la inflación de enero fue 2,3%, luego de ubicarse en 3,7% en diciembre. Los principales factores detrás de la desaceleración fueron el congelamiento de las tarifas, la relativa estabilidad del dólar y el acuerdo para bajar el precio de los medicamentos.
Según Ferreres, el rubro Educación lideró las subas, en el marco de la vuelta a clases, al avanzar 3,7% mensual. Transporte y comunicaciones subió 2,9% mensual, principalmente por el aumento en la bajada de bandera de los taxis porteños. Mientras que Indumentaria trepó 2,5%.
Por su parte, Equipamiento y funcionamiento del hogar tuvo un incremento del 2,2% y Alimentos y bebidas, del 2,1%, lo que implicó un aporte de 0,7 puntos al nivel general debido a las subas significativas en verduras, carnes y cereales.
Otras mediciones privadas registraron un alza más fuerte en los alimentos. En su relevamiento de supermercados, el CESO midió a lo largo de febrero un salto de 4,6% en alimentos frescos y 3,9% en alimentos secos. Esto dio como resultado, según centro de estudio que dirige Andrés Asiain, una fuerte escalada del 5,7% en el costo de la canasta básica alimentaria, que marca la línea de indigencia. Se trata de una suba similar a la que midió el Indec en enero.
Además, el índice de precios de supermercados del CESO marcó 3,1% el mes pasado. Las mayores alzas fueron en electrodomésticos de Audio (30,2%). Dentro del rubro Alimentos sobresalieron las pastas secas (10,1%) y las conservas (10,1%).